ACERCA DE NOSOTROS
En Victoriem Abogados Especialistas, S.C., conocemos la situación de desconfianza que existe entre la población hacia nuestra profesión, así que nuestro despacho Jurídico año con año se viene esforzando en devolver a cualquier persona que lo necesite la confianza perdida por muchos abogados deshonestos, pues hacemos honor a nuestro lema de protesta como profesionales del derecho, que dice:
“Sabemos que las personas que se nos acercan ponen en nuestras manos la defensa de su patrimonio, su honor, su libertad y tal vez su vida, confiando no sólo en nuestro saber, sino también y acaso más en nuestra lealtad y honradez, estimando que seremos incapaces de anteponer a su interés legítimo, nuestros propios intereses y pasiones…”.
Así, validamos cada día y con cada cliente nuestro juramento.
Para nosotros, la palabra abogado no sólo representa el título de nuestra profesión, ya que en la etimología la palabra abogado deriva del latín advocatus (Llamado a socorrer).
Y aunque también el médico es llamado a socorrer, si solamente al abogado se le da este nombre, quiere decir que entre la prestación del médico y la prestación del abogado existe una diferencia, la cual, no advertida por el derecho, es, sin embargo, descubierta por la exquisita intuición del lenguaje.
Entonces, abogado es aquel al cual se pide, en primer término la forma esencial de la ayuda, que es, propiamente, la amistad; y ésta, la guía de nuestra filosofía y los valores que deben regir nuestro trabajo.
Así en cada abogado de nuestro despacho Jurídico encontrará un amigo del cual apoyarse y sobre todo, sentirse seguro al saber que pondrá toda diligencia como si el asunto fuese propio.
Asimismo, nuestro servicio más allá de ser especializado cuenta con juristas de gran calidad moral, empatía con sus problemas y sentido del deber hacia su profesión, por lo que usted siempre recibirá de nosotros:
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Asesoría y asistencia legal clara y sencilla, para que logre entender el tema sobre el que versará su asunto.
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Franqueza y sinceridad sobre la procedencia o tasa de éxito de su juicio.
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Amabilidad y buen trato en todo momento.
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Información puntual y exacta sobre el estado judicial de su asunto.
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Atención directa y rápida.
